ayudas técnicas > turismo accesible
En Internet, hay múltiples portales especializados en ofrecer información a las personas con movilidad reducida acerca de la accesibilidad de los establecimientos, tanto públicos como privados, que permita establecer la valoración de las condiciones de acceso, circulación, estancia y uso adecuado de las instalaciones de interés turístico y social.
Se analizan pues hoteles, edificios públicos, centros de cultura y ocio, instalaciones deportivas, parques, playas, etc.
Estos portales también ofrecen información a las personas con otras limitaciones físicas o sensoriales.
Además, muchos portales son interactivos, de manera que el usuario puede ir añadiendo información relevante de interés acerca de sitios que no figuren en la web, ampliándose así la red de lugares accesibles donde disfrutar de unas vacaciones o tiempo de ocio.
Hablamos de un local adaptado y completamente accesible cuando cualquier persona con movilidad reducida puede acceder de forma autónoma al local:
Accesos
– Llanos sin peldaños o con rampa longitudinal alternativa y pendiente suave.
– Hasta un 12% con recorrido de 3 metros o menos
– Hasta un 8% con recorrido de 3 a 10 metros – Rampa trasversal con pendiente máxima del 2%
– Puertas y pasos libres: Ancho de 80 cm. o mas
Ascensores
– Ancho de puerta 80 cm. o mas
– Altura de la botonera de 140 cm. o mas – Profundidad mínima de cabina de 110 cm.
Aseos
Lavabos:
– ancho de puerta de 80 cm. o mas – espacio libre de obstáculos para inscribir un círculo de 150 cm.
Inodoros/duchas:
– ancho de puerta de 80 cm. o mas espacio para realizar transferencia
– barras de apoyo/asientos
– Suelos antideslizantes.
Por otro lado, es importante tener en consideración que los empleados de los sitios que se ofertan como turismo accesible, reciben formación acerca de cuál es el trato adecuado a clientes que presenten movilidad y/o comunicación reducidas, resumiéndose así algunas de sus pautas de actuación.
Pautas de actuación
a. Recomendaciones generales:
– respeto a las características de cada uno
– la normalidad – la apertura al trato y la naturalidad en la relación
b. Recomendaciones específicas:
b.1 Personas que caminan despacio y/o usan muletas:
. ajustemos nuestro paso al suyo. . evitémosle posibles empujones. . ayudémosle si tiene que transportar objetos o paquetes.
. no le separemos de sus muletas.
b.2 Personas que usan silla de ruedas:
. Para hablar con ella, situémonos de frente y a la misma altura (a ser posible sentados) . Si desconocemos el manejo de la silla, preguntémosle al usuario cómo ayudarle. . Dirijámonos a la persona en silla de ruedas y no a su acompañante.
b.3 Personas con discapacidad para hablar:
. Procuremos no ponernos nerviosos si se dirige a nosotros . Tratemos de comprender, sabiendo que el ritmo y la pronunciación son distintos a los acostumbrados . Si no hemos comprendido lo que nos dice, conviene hacérselo saber para que use otra manera de comunicarnos lo que desea. . No aparentemos haber comprendido si no ha sido así.
b.4 Personas con discapacidad visual:
. Identifiquémonos siempre al dirigirnos ella . Si se le ofrece o indica alguna cosa, aclarémosle de qué se trata y en qué lugar se encuentra . Si precisa de ayuda, ofrezcámosle el brazo y caminemos ligeramente por delante. . Advirtámosle de posibles obstáculos que se encuentren a su paso. . No la dejemos sola, sin advertírselo antes.
b.5 Personas con discapacidad para oir:
. Dirijámonos a ella cuando nos esté mirando, evitando hacerlo si se encuentra de espalda . Si no conocemos la lengua de signos, hablémosle despacio y claro, con el rostro bien iluminado
. Verifiquemos que ha comprendido lo que le tratamos de comunicar.
. En caso de mucha dificultad, podemos escribir aquello que queremos decirle.
b.6 Personas con limitaciones de comprensión:
. Seamos naturales y sencillos en nuestra manera de hablar . Respondamos a sus preguntas, asegurándonos de que nos ha comprendido. . Salvo para cuestiones intelectuales, tratémosle de acuerdo con su edad.
. Limitemos la ayuda a lo necesario, procurando que se desenvuelva sola en el resto de las actividades . Facilitemos su relación con otras personas.
b.7 Personas con alteraciones del comportamiento:
. Seamos discretos en el contacto con personas afectas de discapacidades para las relaciones personales. . Evitemos situaciones que puedan generar violencia, como discusiones o críticas. . Tratemos de comprender su situación, facilitando siempre su participación en todas las actividades
b.8 Otras discapacidades:
Existen otras discapacidades, algunas de ellas más difíciles de observar, como pueden ser las relacionadas (ej.reacciones alérgicas) En la relación con estas personas, como para el resto de las mencionadas, tenemos que preguntarles cómo desean ser tratadas.
Fuente: folleto realizado por Polibea para el Real Patronato sobre Discapacidad
Para concluir, indicarle que en la sección “enlaces” de infogerontologia.com, concretamente en la subsección “de interés”, dispone de varios links que ofrecen información acerca de lugares donde es posible disfrutar de un turismo accesible.
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